Al parecer ya se están creando algunas formas para dar solución a la terrible ola de ataques y asaltos, cada día vemos en los noticieros los ataques con armas de fuego o explosivos a vehículos de empresarios o personas comunes, entidades bancarias y empresas privadas, por parte de bandas de asaltantes que en ocasiones el disparo o los pedazos de vidrio que saltan por todo lado son la causa de muerte, y la otra modalidad que causan las explosiones son las inclemencias temporales como huracanes, tormentas, etc.; pero con el diseño de este nuevo tipo de vidrio, de alguna forma se podrá evitar o por lo menos disminuir tanta muerte.
A demás sabemos también que la ruptura de los vidrios comunes y las lesiones que causan los fragmentos de estos al desprenderse durante una explosión son una de las principales causas de muerte en el marco de un atentando o un desastre natural. Frente a esto, un grupo de ingenieros de la University of Missouri y de la University of Sydney (Australia), trabaja en un nuevo tipo de vidrio capaz de resistir estos accidentes.
Las estadísticas marcan que durante un huracán, un tornado o un ataque con bombas, entre otros incidentes similares, una de las principales causas de lesiones y de accidentes fatales se relaciona con los fragmentos de vidrio que se desprenden desde las ventanas y otras estructuras.
Es que cualquier tipo de explosión o los vientos de gran intensidad pueden causar que las ventanas de los edificios se hagan añicos, arrojando pedazos irregulares de vidrio en todas las direcciones. El nuevo vidrio que están desarrollando dichos ingenieros, es más ligero, delgado e incoloro y, además, es lo suficientemente resistente como para soportar la fuerza de una explosión, un terremoto, huracanes o vientos de suma intensidad.
Actualmente se utilizan un tipo parecido de vidrios resistentes a este tipo de agresiones, como los ubicados en los vehículos de los jefes de estado o en las ventanas de los edificios gubernamentales o militares más importantes. Sin embargo, estas tecnologías insumen un grosor y un costo en los vidrios que imposibilita su uso en una ventana normal.
Siendo así, es algo difícil reemplazar las ventanas de vidrio estándar en las estructuras actuales, en casas comunes y corrientes. El nuevo vidrio resistente a explosiones presenta capas de polímero puro, un compuesto plástico que tiene una capa intermedia de polímero reforzado con fibras de vidrio, registrando solamente un cuarto de pulgada de espesor.
De acuerdo a declaraciones de los ingenieros a cargo del proyecto, una reciente prueba del material que incluyó una pequeña explosión sobre un panel de vidrio, arrojó resultados ampliamente satisfactorios. La investigación motivó recientes artículos en los medios especializados.
El panel es una capa de plástico reforzado con vidrio, que se ubica entre dos hojas delgadas de vidrio. La extrema delgadez de las fibras, concretamente de entre 15 y 25 micrómetros de diámetro, un grosor que es aproximadamente la mitad del que posee un cabello humano típico, es uno de los factores que facilita el éxito de la nueva tipología.
Mientras el vidrio tradicional a prueba de explosiones presenta una tonalidad verdosa, la resina de polímero utilizada en este nuevo enfoque permite que el cristal sea transparente y absolutamente incoloro. Al mismo tiempo, aunque el nuevo diseño será similar en cuanto a costos a los actuales paneles de vidrio a prueba de explosiones si consideramos solamente el material, su menor grosor y peso marcarán la diferencia.
Es que el hecho de ser más delgado y liviano, mucho más práctico y rentable para instalar permitirá su incorporación en los marcos de ventanas estándar. Su utilización comercial, en consecuencia, tendrá amplias posibilidades de desarrollo, permitiendo el acceso a la población en general. De esta manera, podrán estructurarse diseños a un precio asequible, con paneles sencillos de instalar que permitirán el desarrollo de ventanas resistentes a explosiones en todo tipo de estructuras civiles convencionales, protegiendo las vidas de sus ocupantes contra múltiples amenazas y riesgos.
Hasta el momento, el nuevo vidrio ha sido probado con prototipos a pequeña escala. Próximamente se iniciarán testeos en los cuales el tamaño de los paneles de vidrio se aumentará de dos a cuatro veces, para determinar así el efecto de las dimensiones del material sobre su resistencia a las explosiones. Se espera que en tres o cuatro años puedan estar disponibles en forma comercial paneles resistentes a explosiones con un tamaño de 48 por 66 pulgadas.
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